









En Shipturtle, nuestro viaje comenzó no con un plan de negocio, sino con un dolor. Una sensación que vivimos y que no deseamos para nadie más.
Nuestro fundador, Sharad Kabra, al construir su otra empresa – My Bageecha, un oasis verde para amantes de las plantas, tuvo dificultades para hacer crecer su negocio. Cada pedido realizado traía no solo alegría, sino también un nuevo obstáculo: desajustes en el inventario, confusión con los proveedores, envíos tardíos, limitaciones tecnológicas. Lo que debería haber sido un viaje gratificante se convirtió en una batalla cuesta arriba con sistemas rotos. Sharad se dio cuenta de algo dolorosamente claro: escalar un mercado no debería sentirse como ahogarse en el backend. Buscó ayuda, herramientas que pudieran simplificar y apoyar. Pero lo único que encontró fueron soluciones complejas y costosas, diseñadas solo para grandes empresas, ignorando las verdaderas luchas de las startups y negocios en crecimiento. Se sentía injusto. Se sentía como si las pequeñas empresas tuvieran que resolverlo solas.
Ese momento encendió algo más grande.
Con empatía y determinación, Sharad se propuso crear la solución que deseaba, una que no solo solventara problemas, sino que realmente empoderara a los negocios del mercado desde sus cimientos. Ese sueño se convirtió en Shipturtle..


Estamos aquí para que ningún fundador tenga que luchar solo como lo hicimos una vez. Ya seas un solopreneur comenzando o una empresa gestionando operaciones complejas, Shipturtle es tu socio en el crecimiento. Un socio en el que puedes confiar al 100%, que ofrece una plataforma poderosa, flexible y asequible para crear, gestionar y escalar tu mercado sin esfuerzo.
No fuimos creados en una sala de juntas, nacimos en los campos de batalla. Sabemos cómo se siente el caos. Entendemos lo que significa cuidar de cada cliente, cada pedido, cada proveedor, pero no poder atenderlos bien. Por eso hemos creado Shipturtle, para llevar esa empatía en cada función, cada actualización, cada conversación.
Porque creemos que la tecnología debería ayudar a las personas, no abrumarlas.
Y ningún negocio, grande o pequeño, debería sentir que es demasiado pequeño para importar.















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Ahmedabad, Gujarat



